El video emitido por la cadena Fox fue visto más de 3 millones de veces. La razón no es para menos: narra la emotiva historia de una madre que perdió a su bebé y decidió vender su cuna. La buena acción de la persona que se la compró hizo que su dolor se mitigara gracias al hermoso regalo que recibió.
Valerie Watts es una joven oriunda de Cokato, Minessota, quien vio truncada sus esperanzas de disfrutar de la maternidad al dar a luz su bebé muerto.
Según contó esta joven madre a una entrevista para Fox, ella presentía que algo andaba mal una semana antes de su fecha de parto, pues no sentía tan a menudo los movimientos de su bebé. Para cuando comenzó el parto, el cordón umbilical se comprimió dentro del útero y el desenlace fue fatal: el bebé nació muerto.
Como toda mamá, Valerie tenía todo preparado para la llegada de su bebé. Ver sus cositas le daba mucho dolor y le recordaba que no tenía a su bebé en brazos, por lo que decidó hacer una venta de garaje. La cuna, uno de los elementos más significativos y anhelados, significaba algo muy importante, sin embargo, se decidió a venderla cuando un matrimonio se interesó en ella.
Según reporta Daily News, esta joven pensó que desprenderse de la cuna aliviaría al menos un poco su luto, la vendió a este matrimonio. El hombre era carpintero y tenía en mente hacer algo muy bonito con esa cuna. Valerie contó a FOX "su esposa estaba viendo algunas ropitas de mi bebé y me preguntó cuánto tiempo hacía que mi bebé no usaba más la cuna", a lo cual Valerie le respondió que su bebé había nacido muerto. Cuando la mujer le contó esto a su esposo, ya iban camino a casa con la cuna que habían adquirido; el hombre tomó una drástica decisión.
Transformar un mal recuerdo en un memorial
Las manos de este artesano llamado Gerald se pusieron a trabajar para darle una gran sorpresa a esta valiente madre. Cuando llegó a su estudio, puso manos a la obra y convirtió la cuna en un hermoso sillón. Una semana más tarde, Gerald tocó la puerta de valerie y le entregó el pequeño sillón que había hecho, en memoria de su bebé. Valerie rompió en llanto y dijo "es increíble ver que aún hay gente buena allí afuera"
Seguramente Valerie vaya a tener más hijos, pero nadie ni nada en el mundo harán que ella olvide este tremendo dolor. Sin embargo, acciones como las que emprendió este carpintero ayudan a muchas personas que están transitando un momento de dolor. Se trata de brindarnos al máximo, de dejar de lado nuestros egoísmos y elegir abrigar las esperanzas de los más necesitados.
Este hombre bien podría haber vendido ese sillón. Sin embargo, optó por hacer un acto de bien y llevar alegría a esa familia que había tenido una gran pérdida. Valerie tendrá una grata historia que contar dentro del dolor de lo ocurrido, y quién sabe, tal vez esa sillita abrigue cuentos y risas del próximo bebé que tenga. Una triste historia, con una luz de esperanza. Y tú ¿habrías hecho lo mismo que el hombre?